Muchas veces cuando escucháis sobre fondos de inversión se cita directamente a la rentabilidad. Porque esa es el alma matter de la cuestión.
No busquéis ganancias, buscad rentabilidad
Y si os fijáis en el ranking de nuestra liga tendréis la rentabilidad que va adquiriendo cada club a lo largo de la competencia.
Porque la rentabilidad es el dinero que se va acumulando a lo largo del tiempo, puede ser más o menos pero es una vista clara de la evolución de un fondo.
Y eso se logra a través de una buena gestión del capital.
La gestión es la piedra fundamental para obtener buenas rentabilidades: saber cuando entrar, cuando dinero invertir, cuanto dinero líquido conservar y cuando es un buen momento para salir.
Es como un organismo vivo que va evolucionando a lo largo del tiempo.
¿Se puede tener una racha ganadora o perdedora? Si, y eso no significa ni bueno ni malo. Es normal y natural en cualquier inversión. Lo importante es el resultado final de toda la operativa.
¿Y como se calcula la rentabilidad de un fondo?:
((Valor liquidativo final – Valor liquidativo inicial) / Valor liquidativo inicial) x 100
El valor liquidativo se calcula de la siguiente forma:
Patrimonio del fondo / Nº de participaciones en circulación
Así como la cantidad de participantes pueden variar en el tiempo, el aumento o disminución de la rentabilidad dependerá de las distintas decisiones de los gestores al momento de abrir o cerrar posiciones.
Por ello, lo que realmente hace una buena rentabilidad no es lo mucho o poco ganado, sino lo bien gestionado que haya estado.
Recordad que rentabilidades pasadas no aseguran las futuras, pero lo que si podemos vislumbrar, analizar y estimar los resultados futuros será al equipo gestor.