Trump aprieta pero no ahorca… podríamos aplicar ese dicho en la dialéctica de Trump, que tras meses de intenciones de romper lazos con sus países limítrofes, ha llegado a un acuerdo con México.
Trump aprieta pero no ahorca en la guerra comercial
Trump arroja la piedra, o tweet, y luego esconde la mano, o el móvil. Ese parece ser su proceder en estos ya dos años de mandato a la Casa Blanca en la que arribó con el lema «Make America great again».
El muro con México parece haber quedado en un segundo plano, el cual aseguraba pagarán los mexicanos.
Enrique Peña Nieto, presidente saliente del estado latinoamericano, ha llegado a un acuerdo con el inquilino de la Casa Blanca el cual han llamado «Acuerdo Comercial entre EE.UU. y México». El mismo beneficia al sector automotriz que se veía afectado por la imposición de aranceles a diestra y siniestra por parte del gobierno estadounidense.
A la deriva ha quedado Canadá que deberá negociar su parte con el gobierno de Trump.
«Ya veremos si tratamos un acuerdo a parte con Canadá o uno más sencillo», dijo Trump a Peña Nieto durante la llamada telefónica que sostuvieron ante los medios de comunicación.
Recordemos que durante la reunión del G7 celebrada en Canadá la actitud de Donald Trump no fue la mejor y desde la Casa Blanca afirmaron en su momento que el gobierno canadiense tenía un lugar en el infierno ante las apreciaciones al respecto del comportamiento del mandatario estadounidense.
Pero podríamos esperar un acuerdo factible para ambas partes si pensamos los diálogos entre México y EE.UU. en torno al muro durante las elecciones de 2016.
Insisto, Trump aprieta pero no ahorca. Lo vimos con Corea del Norte y Europa. Aunque con Rusia, Siria, China e Irán no parece querer cambiar de opinión.
Quedan aún dos años para verlo twittear a Trump y sus tweets decisions.
